El encargo para esta edificación consistía no solo en conseguir un espacio amplio y diáfano para la celebración de grandes eventos, sino también en lograr un espacio único y memorable lleno de energía. La parcela dividida en dos niveles claramente marcados, nos sirve de inspiración para aprovechamiento óptimo de la misma. El diseño genera un gran interior que se abre al paisaje a través de un ventanal con dimensiones infinitas. En la cubierta, una extensión de césped sirve para realizar celebraciones al aire libre. Este diseño pretende establecer un nuevo punto de referencia en la arquitectura contemporánea.